Tarta mousse de chocolate blanco y negro
Una tarta muy parecida a la de queso y mousse de chocolate, con la diferencia que en lugar de tarta de queso, lleva una mousse de chocolate blanco, lo que aparte de cambiar el sabor (un poco más dulce por el ingrediente en sí) lo hace también el aspecto, ya que la mousse queda mucho más blanca y diferenciada.
Una tarta más ligera para un postre de celebración, ya que las tartas tipo mousse en general son menos densas que cualquiera tipo bizcocho. Muy rica de sabor y muy bonita por el contraste de colores. Perfecta para disfrutar en buena compañía.
Ingredientes: (para un molde cuadrado de 20 cm de lado)
Para la base de galleta:
- 55 g de harina de repostería o todo uso,
- 30 g de cacao puro en polvo,
- una pizca de sal,
- una pizca de bicarbonato sódico,
- 30 g de azúcar moreno,
- 40 g de azúcar,
- 40 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 1/2 cucharadita de aroma de vainilla,
- 25 g de leche,
- 30 g más de mantequilla a temperatura ambiente para triturar con la galleta.
Para la mousse de chocolate blanco:
- 100 g de leche,
- 100 g de nata de montar,
- 1 vaina de vainilla,
- 7 g de gelatina en hojas,
- 280 g de chocolate blanco,
- 320 de nata semi-montada.
Para la mousse de chocolate negro:
- 90 g de chocolate negro (72% cacao),
- 30 g de mantequilla,
- 2 yemas de huevo mediano,
- 2 claras de huevo mediano,
- 30 g de azúcar,
- 1 cucharada de azúcar,
- 120 ml de nata de montar,
- 1/4 cucharadita de aroma de vainilla,
Para el ganaché:
- 75 ml de nata para montar,
- 50 g de chocolate negro (72% cacao),
Para decorar (opcional):
- Caramelo,
- cereales de desayuno,
- chocolate.
Elaboración:
De la galleta:
Con thermomix:
Ponemos en el vaso la harina, el cacao, el bicarbonato y la sal, mezclamos 10 segundos a velocidad 6. Reservamos.
Sin thermomix:
Tamizamos la harina, el cacao, el bicarbonato y la sal, mezclamos bien. Reservamos.
Con thermomix:
Sin lavar el vaso, ponemos los 2 tipos de azúcar, la mantequilla, la vainilla y la leche. Mezclamos 15 segundos a velocidad 4.
Sin thermomix:
Por otro lado, ponemos en un bol o en el de labatidora la mantequilla, el azúcar moreno, el blanco, la vainilla y la leche. Batimos con varillas.
Con thermomix:
Incorporamos a cucharadas la mezcla de harina y cacao, con la máquina en marcha a velocidad 3 hasta que se integre.
Sin thermomix:
Incorporamos a cucharadas la mezcla de harina y cacao, batimos con la pala hasta que se integre.
Ponemos la masa entre dos papeles de horno y estiramos con el rodillo hasta que tenga un grosor de 1/2 cm. aproximadamente. La forma da igual porque luego la hemos de romper.
Horneamos en el horno precalentado a 175º C unos 10 ó 15 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Una vez fría la partimos en trozos, la mezclamos con la mantequilla y la trituramos bien con una picadora o con la thermomix.
La extendemos en nuestro molde, si es de silicona, no necesitamos forrarla con papel de horno, si fuera de metal, sí. Reservamos unos 10 minutos en el congelador.
Horneamos en el horno precalentado a 175º C unos 10 minutos.
Dejamos enfriar sin desmoldar.
De la mousse de chocolate blanco:
Con thermomix:
Ponemos en el vaso el chocolate blanco a trozos, lo picamos 10 segundos a velocidad 7. Reservamos.
Ponemos la mariposa en el vaso, montamos la nata sin programar tiempo, vigilando a velocidad 3,5. Reservamos en el frigo.
Sin thermomix:
Troceamos y picamos el chocolate con una picadora o un cuchillo. Reservamos.
Semi-montamos la nata con unas varillas eléctricas o manuales. Reservamos en el frigo.
Con thermomix:
Partimos por la mitad a lo ancho y largo una vaina de vainilla, la ponemos en el vaso junto a la leche y los 100 g de nata.
Calentamos 3 minutos, 100º C a velocidad 1.
Ponemos a hidratar la gelatina en agua fría.
Incorporamos el chocolate, mezclamos 30 segundos a velocidad 3.
Sin thermomix:
Partimos por la mitad a lo ancho y largo una vaina de vainilla, la ponemos en un cazo junto a la leche y los 100 g de nata, lo llevamos a ebullición.
Dejamos que hierva a fuego medio unos 5 minutos.
Ponemos a hidratar la gelatina en agua fría.
Incorporamos el chocolate, mezclamos bien con unas varillas.
Con thermomix:
Añadimos la gelatina escurrida, mezclamos 20 segundos a velocidad 4.
Unimos esta preparación con la nata que teníamos reservada en el frigo con una espátula y movimientos envolventes.
Sin thermomix:
Añadimos la gelatina escurrida, mezclamos bien de nuevo con las varillas.
Unimos esta preparación con la nata que teníamos reservada en el frigo con una espátula y movimientos envolventes.
Echamos la mousse de chocolate blanco en el molde sobre la base de galletas.
Dejamos enfriar bien unas 5 horas o de un día para otro en el frigo.
De la mousse de chocolate negro:
Derretimos el chocolate con la mantequilla en el micro, reservamos dejando templar.
Semi-montamos la nata con la vainilla y la cucharada de azúcar ayudándonos de varillas, batidora o thermomix. Reservamos en el frigo.
Montamos las claras a punto de nieve junto a los 30 g de azúcar, no ha de quedar excesivamente firme.
Agregamos la nata semi-montada a las claras a punto de nieve. Mezclamos delicadamente con una espátula y movimientos envolventes.
Incorporamos las yemas al chocolate derretido y templado, mezclamos bien.
Ponemos una parte de la mezcla de claras y nata en el chocolate, mezclamos con delicadeza, añadimos otra parte y repetimos la operación para aligerar la mezcla.
Unimos el chocolate con el resto de las claras, mezclamos delicadamente con una espátula y movimientos envolventes.
Ponemos la mousse encima de la tarta de queso ya fría, repartimos bien intentando que quede lo más liso y uniforme posible.
Tapamos con film y llevamos al frigo 4 horas o de un día para otro.
Del ganaché:
El día que vayamos a consumir la tarta podemos hacer la última parte.
Llevamos a ebullición la nata, la retiramos del fuego.
Añadimos el chocolate y el aroma, dejamos reposar unos minutos, mezclamos bien hasta obtener una crema uniforme.
Dejamos templar hasta los 26º C aproximadamente.
Lo echamos sobre la mousse de chocolate bien fría. Llevamos al congelador una hora.
Desmoldamos y decoramos.
Está decorada con caramelo, reciclando los trozos de cristal de caramelo que no utilicé en los bizcochitos sangrientos de Halloween, triturados y vueltos a derretir con un poco de agua, echada esta mezcla en un silpat, aprovechando mientras está aún caliente, pero no mucho para no quemarse, cogiendo trozos y estirándolos.
Los adornos de chocolate simplemente, mezclando cereales de desayuno con chocolate derretido y dejado secar.
Luego seleccionamos lo que más nos guste y decoramos.
Servimos.