Hogaza con espelta integral

Hogaza con espelta integral

Una hogaza con el rico sabor de la espelta, sabor que se ve potenciado al estar recién molida, podríamos cambiar las proporciones de harina o utilizar las que tengamos, aunque en ese caso el resultado sería diferente. Por supuesto podemos también utilizar harina de espelta ya molida, saldrá bien también.

Un pan para disfrutar cortando cada rebanada y acompañando cualquier comida o para comer simplemente solo y apreciar así bien, todos los matices de su sabor.

Ingredientes:

  • 300g de harina de fuerza,
  • 200 g de espelta en grano o harina de espelta integral,
  • 315 g de agua,
  • 10g de sal,
  • 4 g de levadura seca de panadería.

Elaboración:

Una forma ideal de obtener una harina de espelta con todo el aroma y a nuestro gusto de textura es molerla nosotros mismos, es muy fácil si disponemos de un robot de cocina que nos ayude a ello, en este caso está molida con thermomix, además resulta mucho más económica que si la compramos ya molida, sobre todo si no podemos comprar grandes cantidades.

Es tan fácil como poner la espelta en grano en el vaso de la thermomix y moler a velocidad progresiva 5-10 durante unos 20 ó 30 segundos, vamos parando para ver qué textura tiene, volviendo a pulverizar hasta conseguir la deseada.

Ponemos en un bol o en el de la amasadora o en el vaso de la thermomix la harina y el agua, lo dejamos reposar una media hora (autólisis).

Añadimos la sal, mezclamos o con una cuchara o con amasadora a velocidad baja, con la thermomix 10 segundos a velocidad 6.

Amasamos hasta que no se pegue a las paredes del bol. Con la thermomix, primero 10 segundos a velocidad 6 y luego, 2 minutos a velocidad espiga.

Incorporamos la levadura. Amasamos de nuevo.

Formamos una bola con la masa, la ponemos dentro de un bol aceitado y la tapamos bien con film transparente.

La dejamos levar hasta que doble su volumen.

Una vez lo haya hecho, sacamos la masa a la encimera, formamos una bola otra vez con ella.

La colocamos boca abajo en una cesta con una tela o banetton bien enharinado, ponemos un poco de harina por encima, tapamos con film o un plástico de cocina y dejamos reposar de nuevo hasta que doble su volumen.

Precalentamos el horno a 250º C.

Una vez lo haya hecho, volcamos en una bandeja con papel de hornear.

Greñamos con un cuchillo de sierra o cuchilla.

Horneamos unos 50 ó 60 minutos con una olla con trapos mojados en su interior para crear vapor los primeros 10 minutos, bajando la temperatura 5ºC ó 10ºC cada 5 minutos hasta llegar a 200º C.

Dejamos enfriar sobre una rejilla.

Una vez frío, ya podemos comerlo a trozos o rebanadas y disfrutar de su estupendo sabor.



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