Crème brûlée
La créme brûlée es una crema de huevos y lácteos que lleva en su parte superior una capa de caramelo que se consigue quemando con un soplete un poco de azúcar espolvoreado por encima.
Su aspecto exterior recuerda mucho a la crema catalana, también son muy parecidos sus ingredientes, la diferencia principal está en que la crema catalana lleva almidón como espesante y no se cocina en el horno como la crème brûlée.
Cualquiera de las dos es una estupenda opción de postre, sólo hemos de tener en cuenta el tiempo de cocinado y enfriado para tenerla lista en el momento que deseemos.
Ingredientes: (para 4 personas)
- 100 g de leche,
- 300 g de nata de montar,
- 2 vainas de vainilla o esencia de vainilla de buena calidad,
- 5 yemas de huevo,
- 65 g de azúcar,
- Azúcar para espolvorear y caramelizar.
Elaboración:
Para este postre sólo necesitamos las yemas de los huevos, pero no hemos de tirar las claras, las podemos aprovechar para hacer este rico bizcocho de claras y mandarinas.
Precalentamos el horno a 90º C, con ventilador.
Ponemos en un cazo la leche, la nata, la mitad del azúcar y la vainilla. Llevamos a ebullición, retiramos del fuego, dejamos templar.
Aparte, ponemos en el bol de la batidora las yemas y el resto del azúcar, batimos con las varillas hasta blanquear.
Una vez esté templada la mezcla de la leche con la batidora en marcha a velocidad media añadimos ésta a las yemas.
Colamos para eliminar las posibles impurezas.
Repartimos la crema en cuencos que puedan ir al horno.
Horneamos a 90º C 1 hora y 30 minutos o hasta que tenga textura de gelatina.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente y llevamos al frigo un par de horas.
En el momento de servir, sacamos del frigo, espolvoreamos la superficie con azúcar y la quemamos con un soplete de cocina.
Sólo queda disfrutar de este delicioso postre.
Es genial el momento en que se parte el caramelo para poder comer este postre.
¡Buen provecho!