Tarta Castillo de Moya

Tarta Castillo de Moya

Una tarta grandecita para celebrar un cumple familiar de varias personas.

Cuando quedó claro cual iba a ser el motivo y que no sería toda de fondant,  pensé en esta combinación como decoración, pétalos de crema alrededor de la tarta cómo he visto últimamente en algunas tartas por la red, ya que me encanta como queda y una lámina de fondant blanca pintada a mano,  puesto que tenía muchas ganas de pintar algún trozo mayor de los que pinté en mi primera prueba con colorantes alimentarios sobre unas galletas decoradas con fondant .

Así que este fue el resultado, una rica tarta de chocolate rellena de ganaché de chocolate negro y dulce de leche y recubierta con más ganaché, rematada por la lámina de fondant pintada a mano.

Ingredientes: (para una tarta de unos 30 centímetros de diámetro)

Para el bizcocho: (molde 27 cm de diámetro)

  • 175 g de mantequilla a temperatura ambiente,
  • 125 g + 125 g de azúcar,
  • 10 huevos,
  • 190 g de chocolate fondant,
  • 150 g de harina de repostería,
  • 20 g de levadura química.

Para el relleno:

  • ganaché de chocolate negro: (podemos ver su elaboración en esta receta)
    • Un litro de nata de montar,
    • un kilo de chocolate postres.
  • dulce de leche (unos 400 g).

Para la decoración:

  • Fondant de miel blanco,
  • Rotulador comestible marrón.
  • Colorantes alimentarios en gel azul, rojo, amarillo y negro diluidos en alcohol blanco (ginebra).

Elaboración:

Comencé por la lámina pintada unos días antes para asegurarme de tener tiempo en el caso que me tocase repetirla y pudiese secarse un poco.

Lo primero fue imprimir la foto elegida para tener de donde copiar a la hora de pintar.

Calqué también sobre papel de hornear las líneas principales de la imagen para marcarlas sobre el fondant y tenerlas como guía.

Una vez marcadas, a darle a los pinceles, trabajando primero los fondos.

Un plato blanco puede servir como paleta de nuestros colorantes alimentarios.

Añadiendo poco a poco más colores y detalles a la imagen.

Hasta completarla añadiendo los últimos detalles con rotulador comestible en algunas zonas

Como detalle para regalar, unas láminas pequeñas con el mismo motivo algo más simplificado.

Lo que queda es lo más sencillo, hacer el bizcocho:  elaboración: AQUÍ

Una vez hecho y dejado reposar el bizcocho de un día para otro, lo partimos en tres partes iguales y lo rellenamos de ganaché de chocolate negro y dulce de leche en sus dos capas y lo recubrimos con más ganaché. No hace falta que quede perfecto, pero sí bien, para que cuando tapemos con los pétalos no quede ningún hueco de otro color o textura.

Dejamos que se enfríe unas horas la cobertura en el frigo.

Colocamos la plancha de fondant con el motivo pintado centrándola bien y decoramos con la manga pastelera o pistola de galletas en este caso, con una boquilla circular lisa.

Vamos poniendo gotas del mismo tamaño intentando que queden bien alineadas y luego las vamos aplastando con una cucharilla.

Hacemos lo mismo en todo el contorno de la tarta, es entretenido, pero no demasiado difícil.

Me encanta como queda esta decoración, rica y bonita, ¡ñam!



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *