Tarta Red Velvet

Tarta Red Velvet

Una pequeña tarta para disfrutar de ella un día especial o un día porque sí, porque nos apetece darnos un capricho.

La textura de este bizcocho suave junto a la crema de queso que lo rellenan y cubren hacen de éste un bocado delicioso.

Su aspecto es lo más curioso por el color que queda oculto bajo la cobertura y se descubre como sorpresa cuando cortamos el primer trozo.

Un disfrute para la vista y el paladar, cómo no.

Fuente: De Uvas a Peras

Ingredientes: (para un molde de 13 centímetro de diámetro)

Para el bizcocho red velvet:

  • 125 g de harina de repostería,
  • 125 g de azúcar,
  • 1/2 cucharadita de cacao puro en polvo,
  • media cucharadita de sal,
  • 1/2 cucharadita de levadura química,
  • 1 huevo tamaño L (grande),
  • 100 g de aceite de girasol,
  • 1/2 yogur natural,
  • 1 cucharadita de colorante rojo.
  • 1/2 cucharadita de vinagre,
  • 1 y 1/2 cucharada de leche.

Para el cream cheese frosting:

  • 200 g de nata de montar,
  • 400 g de queso de untar,
  • 150 g de azúcar glacé,

Para decorar:

Elaboración:

Del bizcocho:

Precalentamos el horno a 170º C.

Con thermomix:

Ponemos en el vaso la harina, el azúcar, el cacao, la levadura y la sal, mezclamos 30 segundos a velocidad 6. Reservamos.

Sin thermomix:

En un bol tamizamos la harina, el azúcar, el cacao, la levadura y la sal, lo mezclamos con una cuchara. Reservamos.

Con thermomix:

Ponemos en el vaso el huevo, colocamos la mariposa y lo batimos 1 minuto a velocidad 4.

Sin thermomix:

Con varillas batimos el huevo hasta que blanquee.

Con thermomix:

Añadimos el aceite, batimos de nuevo 1 minuto a velocidad 4.

Incorporamos el yogur, el colorante y el vinagre. Batimos 30 segundos a velocidad 2,5.

Sin thermomix:

Añadimos el aceite, batimos hasta que se integre.

Incorporamos el yogur, el colorante y el vinagre. Batimos de nuevo.

Con thermomix:

Agregamos la harina poco a poco a cucharadas por el bocal con la máquina en marcha a velocidad 1 hasta que esté acabemos con ella.

Incorporamos la leche, batimos 10 segundos a velocidad 2,5.

Sin thermomix:

Agregamos la harina poco a poco a cucharadas batiendo a la vez.

Incorporamos la leche, batimos de nuevo.

Vertemos la mezcla en el molde elegido previamente engrasado para que podamos desmoldarlo con facilidad.

Horneamos a 170 º C unos 40 minutos o hasta que si pinchamos con un palilo vemos que éste sale limpio.

O en la cocimix: menú horno, 50 minutos + 10 minutos de mantenimiento de calor, válvula quitada.

Dejamos enfriar sobre una rejilla.

De la crema:

Mientras, podemos hacer nuestra crema de queso, para ello sólo tenemos que montar bien la nata por un lado y por otro batir el queso con el azúcar y la esencia de vainilla.

Incorporamos la nata montada a la otra mezcla hasta que se integre con una espátula con movimientos envolventes.

Montaje:

Una vez frío el bizcocho lo partimos en tres capas y rellenamos su interior con la crema de queso.

Cubrimos la parte de arriba y laterales con una primera capa de crema.

Llevamos al frigo una media hora o más para que se enfríe y asiente tanto la tarta como la crema restante.

Mientras, podemos dedicarnos a hacer la decoración. En este caso unas sencillas rositas hechas con tiras de fondant rojo enrolladas sobre unas hojita verdes marcadas con una esteca.

Cuando esté más firme la crema seguimos dando una segunda capa para que cubra bien todo.

Terminamos decorando un poco con una manga pastelera y la boquilla que más nos guste.

Sólo queda colocar las decoraciones.

Y sorprender al cortar por su bonito color y delicioso sabor.



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