Tarta de lima y mascarpone

Tarta de lima y mascarpone

Las tartas que no necesitan del horno para su elaboración, como ésta de lima y queso mascarpone, resultan muy refrescantes y apetecibles, sobre todo los días de calor.

Además de ricas y refrescantes, son bastante sencillas de hacer, son esas tartas que sabemos que en poco rato (teniendo en cuenta el tiempo de cuajado) vamos a poder disfrutar.

Ingredientes: (para un molde de 16 cm de diámetro)

Para la base:

  • 100 g de galletas tipo María,
  • 40 g de mantequilla a temperatura ambiente.

Para la parte central:

  • De 100 g a 125 g de leche condensada,
  • 250 g de queso mascarpone,
  • la ralladura de 1 lima,
  • 100 g de zumo de lima (unos 200 g de limas),
  • 4 g de gelatina en láminas.

Para decorar:

  • Ralladura de lima.

Elaboración:

De la base:

Con thermomix:

Ponemos en el vaso las galletas, las trituramos 15 segundos a velocidad 7.

Añadimos la mantequilla, mezclamos 5 segundos a velocidad 5.

Sin thermomix:

Ponemos en una picadora las galletas, las trituramos bien.

También las podemos triturar metiéndolas en una bolsa y pasando un rodillo por encima.

Añadimos la mantequilla, mezclamos hasta que esté bien repartida.

Ponemos la base de galleta en un molde desmontable o en un aro, aplastamos con el dorso de una cuchara.

Con esta cantidad de ingredientes sale una tarta pequeña, si la necesitamos hacer mayor, sólo hay que doblar las cantidades.

Con thermomix:

Ponemos en el vaso la leche condensada, el queso y la ralladura de una lima.

Colocamos la mariposa y batimos 2 minutos a velocidad 3.

Reservamos en el frigo.

Sin thermomix:

Ponemos en la batidora de varillas o en un bol la leche condensada, el queso y la ralladura de una lima, batimos bien hasta que se integre todo.

Reservamos en el frigo.

Nota:

La cantidad de leche condensada puede variar según gustos, si os gusta que se note la acidez de las limas, con 100 g es suficiente, si os gusta más dulce, podéis aumentar hasta 125 g.

Con thermomix:

Antes de exprimir las limas, sacamos la ralladura que necesitamos para decorar.

Echamos el zumo de limas en el vaso, lo calentamos 2 minutos a 100º C. No hace falta que hierva, es para que alcance unos 60º C para que se diluya la gelatina.

Mientras, ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.

Echamos la gelatina hidratada y escurrida y mezclamos 10 segundos a velocidad 3.

Dejamos templar.

Sin thermomix:

Antes de exprimir las limas, sacamos la ralladura que necesitamos para decorar.

Echamos el zumo de limas en un cazo, lo calentamos a fuego medio sin que llegue a hervir.

Mientras, ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.

Echamos la gelatina hidratada y escurrida en el zumo y mezclamos hasta que se disuelva.

Dejamos templar.

Con thermomix:

Una vez templado el zumo, vamos echando la crema de queso en el vaso en dos o tres partes, mezclamos con la mariposa puesta cada vez 10 segundos a velocidad 5 hasta que se integre bien todo.

Sin thermomix:

Una vez templado el zumo, vamos echando la crema de queso sobre él en dos o tres partes, mezclamos con varillas hasta que se integre bien todo.

Echamos la mezcla sobre la base de galletas, movemos o golpeamos un poco el molde para que quede lisa la superfície.

Colocamos por encima la ralladura de las limas.

Desmoldamos.

Es una tarta sencilla con una decoración igualmente sencilla, aunque si deseamos, podemos complicarnos mucho más con ésta a nuestro gusto.

Servimos. ¡Deliciosa!



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