Roscón de Reyes (versión 3)

Roscón de Reyes (versión 3)

Desde hace ya unos años, cuando llegan las fechas navideñas, ya empiezo a preparar o buscar la receta del roscón de Reyes, llevo repitiendo esta receta desde que encontré una que nos gustó a todos. Aunque la última vez, la quise hacer con algunos cambios.

El resultado es muy bueno, tanto como la otra, así que se queda como receta de roscón favorita, al menos de momento.

Ingredientes:

Para la masa de arranque:

  • 60 g de leche,
  • 1 g de levadura seca de panadería,
  • 100 g de harina de fuerza.

Para la masa final

  • la masa de arranque,
  • 60 g de leche,
  • 25 g de agua de azahar,
  • la piel de medio limón (sólo la parte amarilla),
  • la piel de media naranja (sólo la parte naranja).
  • 80 g de azúcar,
  • 30 g de miel,
  • 2 huevos grandes,
  • una pizca de sal,
  • 330 g de harina de fuerza,
  • 5 g de levadura  seca de panadería,
  • 110 g de mantequilla a temperatura ambiente.

Para la decoración:

Para rellenar:

Elaboración:

Para la masa de arranque:

Hacemos una masa mezclando los ingredientes con una cuchara o con la mano, formamos una bola y la ponemos en un bol tapada con papel film y la dejamos reposar unas 3 ó 4 horas a temperatura ambiente o toda la noche en el frigo.

Para la masa final:

Trituramos el azúcar con las ralladuras de naranja y limón con una picadora o con la thermomix.

Ponemos en un bol o en la amasadora o thermomix la masa de arranque, la harina, la levadura, la leche, la miel, los huevos, el agua de azahar y la pizca de sal.

Mezclamos bien y amasamos hasta que esté todo integrado.

Añadimos el azúcar aromatizado, amasamos de nuevo.

Incorporamos la mantequilla, amasamos hasta que quede una masa lisa y elástica.

Formamos una bola y la dejamos reposar dentro de un bol, bien tapada, en un lugar cálido, hasta que doble o triplique su volumen.

Cuando haya doblado el volumen, sacamos la masa a la encimera aceitada, para que no se pegue (vendrá bien aceitar nuestras manos también), y le damos forma de rosca. Aprovechamos la forma de bola que tenemos e introducimos los dedos en el centro y vamos agrandando el agujero.

Una vez tenemos la forma con el agujero bien abierto, colocamos el roscón en una bandeja de horno con papel de hornear.

Dejamos reposar nuevamente hasta que vuelva a doblar su volumen el tiempo que sea necesario.

Cuando lo haya hecho, pincelamos con el huevo batido y colocamos encima lo que hayamos elegido: naranja confitada, almendra laminada, azúcar, etc.

Precalentamos el horno a 180° C  calor arriba y abajo.
Horneamos unos 15 ó 20 minutos o hasta que lo veamos dorado (si vemos que se tuesta demasiado, ponemos un papel de aluminio por encima).
Dejamos reposar sobre una rejilla.

Cuando esté frío, rellenamos. Previamente tenemos que tener preparada la nata montada y la trufa negra.

Para ello partimos el roscón por la mitad con un cuchillo.

Introducimos nuestros rellenos en una manga pastelera con boquilla rizada, rellenamos la parte de abajo del roscón (si vamos a poner alguna sorpresa, lo hacemos aquí) y tapamos con la de arriba.

Mantenemos refrigerado hasta el momento de comer.



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