Macarons rápidos
Los macarons son un dulce delicado que requieren tiempo y dedicación, pero si no disponemos de mucho tiempo y nos apetece disfrutar de estos pequeños pastelitos, podemos utilizar esta receta hecha a partir de merengue francés, en lugar del italiano que es el más apropiado. No quedan igual de perfectos, pero para un apaño, no están mal.
Ingredientes: (para unos 15 macarons completos)
Para la masa:
- 100 g de azúcar glacé,
- 55 g de almendra molida,
- colorante alimentario en gel o en polvo,
- 15 g de azúcar en grano,
- 45 g de claras envejecidas.
Para el relleno:
- 200 g de chocolate negro,
- 200 g de nata de montar,
- ralladura de naranja.
Elaboración:
Tamizamos la almendra molida junto con el azúcar glacé pasándola a través de un colador un par de veces.
Añadimos el colorante si es en polvo, mezclamos bien. Reservamos.
Montamos las claras con varillas, cuando empiecen a espumar, añadimos de golpe el azúcar en grano y seguimos montando hasta que estén bien firmes.
Añadimos al merengue la mitad de la mezcla de sólidos que teníamos reservada, vamos mezclando con una espátula de silicona.
Incorporamos el resto y seguimos mezclando hasta que se integre bien y tengamos una consistencia de cinta.
Introducimos la masa en una manga pastelera con boquilla lisa pequeña.
Vamos poniendo porciones de masa en forma de circulo sobre una bandeja de horno con papel de hornear, silicona o teflón. Para hacerlas de un tamaño similar podemos ayudarnos contando o bien podemos situar debajo una plantilla con las siluetas dibujadas con un tapón de botella de agua por ejemplo.
Cuando hayamos completado la bandeja, damos golpes por la parte de abajo con la mano o bien dejamos caer controladamente la bandeja sobre la encimera hasta que desaparezcan los posibles picos que hayan podido quedar.
Este paso es en otro momento donde ahorramos tiempo, en lugar de dejarlos secar hasta que al tocarlos no manchen, lo que hacemos es dejarlos secar unos 15 minutos, es cierto que no salen con tanto pie, pero quedan más brillantes.
Precalentamos el horno a 155º C.
Los metemos en el horno y bajamos la temperatura a 145º C. Los horneamos unos 20 minutos o hasta que estén cocinados, calor arriba y abajo.
Una vez hechos los sacamos del horno y dejamos enfriar sobre la misma bandeja.
Mientras se enfrían, preparamos el relleno:
Ponemos a hervir la nata, cuando llegue a ebullición, la retiramos del fuego, añadimos el chocolate y la ralladura, dejamos reposar un minuto y mezclamos bien.
Dejamos enfriar y refrigeramos para que coja la consistencia deseada, cuando esto haya sucedido, introducimos la crema en una manga pastelera y rellenamos nuestros macarons.
Ya sólo queda, servir y…
… Comer, la textura queda bastante conseguida ¡ñam!