Espigas de pan de cebolla

Una bonita manera de hacer barras es darles la forma de espiga. Las había visto en varias ocasiones, pero no me había puesto nunca a ello.
La forma es bastante fácil de hacer y no requiere de técnicas complicadas, se consigue con unos sencillos cortes con unas tijeras.
Las podemos hacer con una masa básica de pan o especiadas o con sabor a cebolla como en este caso.
Lo de poner o no semillas es opcional, pero queda un pan muy vistoso con ellas y en especial las de amapola son de mis preferidas.
Fuente: Mundorecetas
Ingredientes: (para 6 espigas de 138 g)
- 250g de harina de fuerza,
- 250g de harina de espelta blanca,
- 300g de agua,
- 1/2 cucharadita de azúcar,
- 1 cucharadita de sal de cayena (o normal),
- una cucharadita de pimentón dulce,
- 1 cucharadita de lecitina de soja (opcional),
- 20 g de sopa de cebolla (sopa de cebolla deshidratada de sobre),
- 5g de levadura seca,
- 1 huevo (para pincelar),
- semillas de amapola (para espolvorear).
Elaboración:
Mezclamos en un bol grande todos los ingredientes y amasamos hasta que la masa se despegue de las paredes del mismo. Para que el amasado sea más cómodo, podemos hacer pausas de reposo de unos 5 ó 10 minutos, luego la masa es más manejable y se amasa mejor.
Hacemos una bola con la masa y la dejamos en el bol.
Tapamos el bol con film aceitado y algún paño de cocina y lo dejamos reposar que doble su volumen.
Una vez lo haya hecho sacamos la masa a la superficie de trabajo ligeramente aceitada y la dividimos en seis partes iguales.
Formamos cilindros alargados de la longitud de la parte más corta de nuestra bandeja de hornear y colocamos tres de ellos en cada bandeja forrada de papel de hornear.
Para formar las espigas necesitaremos unas tijeras de cocina. Haremos varios cortes a la misma distancia en nuestras barras con una inclinación de unos 30º.
Es mejor hacer un corte y llevar la masa hacia un lado y luego hacer otro corte y llevar la porción de masa hacia el otro lado y seguir así, que no hacer todos los cortes de una vez, ya que una vez cortada la masa se pega algo.
Dejamos levar nuevamente en un lugar cálido y alejado de corrientes nuestra espigas formadas hasta que doblen su volumen.
Una vez doblado el volumen, las pincelamos con huevo batido y espolvoreamos semillas de amapola.
Metemos en el horno previamente precalentado a 200ºC unos 25minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Me gusta mucho la forma de estos panes, además para comer, arrancando con las manos se rompe por la zona más fina y puedes coger porciones con mucha facilidad.