Cheesecake de limón en vasitos
El cheesecake se puede hacer en distintos formatos y de diferentes sabores. El limón le va muy bien y lo convierte en un postre más refrescante aún si cabe.
Esta receta se hace sin horno y en vasitos para poder servirla en porciones individuales. La base de galleta precisamente al ir en vaso no necesita mantequilla ya que no hay que desmoldarlo, de hecho es complicado de comer si se le pone porque con el frío solidifica mucho.
Muy rápido de hacer y más aún de comer.
Ingredientes: (para 8 vasos)
Para la base:
- 180 g galletas tipo digestive.
Para la crema de queso:
- 400 g de queso crema,
- 350 g de leche condensada,
- 100 ml de zumo de limón.
Para la nata:
- 200 g de nata de montar fría,
- 3 cucharadas de azúcar,
- aroma de limón (opcional).
Elaboración:
Sacamos ralladuras del limón para decorar y exprimimos el zumo. Reservamos.
Picamos las galletas con una picadora o metiéndolas en una bolsa de plástico y aplástandolas con un rodillo, o bien con la thermomix durante 5 segundos a velocidad 10.
Repartimos equitativamente la base de galleta en el fondo de los vasos. (En los vasos de las fotos la base lleva mantequilla, como ya he comentado antes, no la necesita)
De la nata:
Montamos la nata con el azúcar y el aroma si lo usamos, hasta que tenga una consistencia firme.
La metemos en una manga pastelera con boquilla rizada.
Reservamos en el frigo.
De la crema de queso:
Ponemos en un bol o en el de la batidora el queso crema, lo batimos con varillas a velocidad media durante unos 4 minutos.
Incorporamos la leche condensada, batimos de nuevo hasta que se integre.
Por último, añadimos el zumo de limón. Batimos de nuevo hasta que la crema tenga una consistencia homogénea.
Repartimos la mezcla en los vasos a cantidades iguales y alisamos la superficie con el dorso de una cucharilla.
Decoramos con la nata y la ralladura de limón.
Conservamos en el frigo.
Servimos bien fresquito.
