Sobaos pasiegos
Los sobaos pasiegos son un dulce cántabro muy conocido en todo nuestro país. En sus orígenes se elaboraban a partir de una masa de pan que se dejaba reposar (dormir o sobar) de ahí su nombre. Esta receta, sin embargo, es una adaptación más moderna que se hace con levadura química y por lo tanto no necesita de dicho reposo.
La característica más notable de estos bollos es el sabor a mantequilla, por lo que hemos de elegir una de buena calidad y si podemos conseguir unos buenos huevos, mejor, ya que será esto lo que marque la diferencia. Aparte de estos ingredientes, llevan poco más y su elaboración es muy sencilla. Lo más laborioso de esta receta es sin duda, los moldes, no son difíciles de hacer, aunque sí entretenidos, así que, vamos a ello.
Fuente: Mundorecetas
Ingredientes: (para 8 sobaos de 9 cm x 8 cm aprox.)
Para la masa:
- 250 g de mantequilla de calidad a temperatura ambiente,
- 250 g de azúcar,
- ralladura de 1 limón,
- 3 huevos a temperatura ambiente.
- 250 g de harina de repostería,
- 15 g de levadura química,
- 1 pizca de sal.
Para los moldes
- 4 hojas de papel de hornear de 42 cm x 38 cm (o similar).
Elaboración:
De los moldes:
Podríamos utilizar moldes de silicona o un molde grande y luego trocear el resultado, pero queda más auténtico presentarlos en estos moldes de papel.
Para que no se desmonten los moldes por el peso de la masa, necesitamos que sean dobles, para ello, ponemos dos hojas de papel de hornear una encima de la otra, las sujetamos si es necesario con unas pinzas dela ropa por ejemplo (en mi caso al ir enrolladas es preciso porque se pliegan).
Dividimos la hoja en 6 partes iguales. Las recortamos sujetando de nuevo con pinzas si es necesario.
Cada trozo doble nos servirá para un molde.
Doblamos por la mitad a lo largo, lo desdoblamos y doblamos de nuevo llevando hasta el centro que tenemos marcado los extremos.
Giramos 90º C la hoja y volvemos a doblar igual, pero esta vez sin llegar al centro (sería la mitad de lo que hemos doblado anteriormente).
Desdoblamos todo.
Sacamos una esquina y la doblamos hacia atrás por la parte más corta del rectángulo, hacemos lo mismo con la otra esquina y doblamos hacia abajo.
Hacemos lo mismo en las esquinas del otro lado y ya tenemos nuestro molde.
Repetimos la operación con el resto de los papeles recortados.
Los colocamos en una bandeja de horno. Aquí sobran, podemos guardarlos para otra ocasión.
De la masa:
Precalentamos el horno a 170º C si es con aire o a 180º C, calor arriba y abajo si es sin aire.
Tamizamos la harina con la levadura y la sal.
Mezclamos con una cuchara.
O bien la ponemos en la thermomix 10 segundos a velocidad 6.
Ponemos en el bol de la amasadora o en un bol el azúcar, la mantequilla y la ralladura de limón.
Batimos con la pala en forma de K hasta conseguir una consistencia homogénea.
Con la batidora en marcha, vamos incorporando uno a uno los huevos.
Añadimos la harina poco a poco con la máquina en marcha a velocidad media hasta que se integre por completo.
Repartimos la mezcla entre nuestros moldes, podemos ayudarnos de una cuchara de helados.
Con una espátula alisamos un poco la superfície.
Los colocamos bien pegados unos a otros para que se desparramen lo menos posible.
Horneamos a 170º C con aire ó a 180º C calor arriba y abajo, unos 30 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Deliciosos con su intenso sabor a mantequilla.
