Galletas de chocolate blanco con gotas de chocolate negro

Galletas de chocolate blanco con gotas de chocolate negro

Adoro hacer y comer galletas, sobre todo si tienen sabor a chocolate y trocitos del mismo entre la masa. Este es el tipo de galleta que más gusta en casa.

Éstas tienen ración doble de trozos de chocolate, blanco y sin leche, lo que les da un aspecto muy apetitoso. Tienen además un toque de cardamomo, que les aporta un aroma y olor deliciosos que hacen que sea difícil comer sólo una.

Ingredientes: (para 32 galletas)

  •  25 g de chocolate blanco rallado,
  • 4 vainas de cardamomo,
  • 150 g de harina de repostería,
  • 5 g de bicarbonato sódico,
  • 1 cucharadita de cremor tártaro (opcional),
  • 115 g de mantequilla a temperatura ambiente,
  • 85 g de azúcar moreno,
  • 3 g de sal,
  • unas gotas de esencia de vainilla concentrada o 1 cucharada de azúcar avainillado,
  • 1 huevo,
  • 115 g de chocolate blanco picado,
  • 100 g de gotas de chocolate negro.

Elaboración:

Rallamos los 25 g de chocolate blanco.

Machacamos con el mortero las semillas de las vainas del cardamomo.

Mezclamos la harina con el chocolate rallado, el bicarbonato, el cardadmomo y el cremor.

Batimos la mantequilla con el azúcar y la sal, hasta que se integren.

Añadimos la esencia y el huevo, batimos de nuevo.

Incorporamos la mezcla de la harina, choco rallado, etc. Mezclamos bien.

Picamos los 115 g de chocolate blanco con la picadora.

Y los añadimos a la masa anterior removiendo con cuidado con una espátula.

Una vez bien mezclado, incorporamos las gotas de chocolate negro y repartimos bien por toda la masa.

Terminamos de amasar con las manos formando una bola con la masa, es un poco pegajosa, pero se puede trabajar.

Hacemos un cilindro con la masa (de unos 28 centímetros de largo por 4 centímetros de diámetro) , lo envolvemos bien en film transparente y lo llevamos al frigo por lo menos un par de horas.

Una vez bien frío habrá endurecido y es el momento de sacarlo para cortar rodajas de un centímetro de grosor aproximadamente.

Precalentamos el horno a 180ºC, calor arriba y abajo.

Vamos depositando las rodajas de masa en una bandeja forrada de papel de hornear, necesitaremos dos bandejas, ya que hay que ponerlas separadas unas de otras porque se expanden al hornearse.

Horneamos 180º C durante unos 10 ó 15 minutos.

Cuando estén, las dejaremos reposar en la misma bandeja donde han sido horneadas unos 5 minutos. Después las pasaremos a una rejilla para que acaben de enfriarse.

Con el aroma que dejan en la cocina difícil resistirse!!!



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