Básculas
La báscula es un utensilio indespensable en la cocina, al menos para mi, sobre todo para panadería y pastelería, ya que en muchas recetas las cantidades están expresadas en gramos y aunque hay algunas jarras que tienen la medida marcada en gramos, esta forma de medir es mucho más inexacta.
Para pesar las cantidades mayores de harina, azúcar, agua… suelo utilizar una báscula sencilla del lidl que va bien porque en ella se pueden pesar hasta dos kilos con intervalos de un gramo. De precio está muy bien como la mayoría de productos de esta marca. Lo único que no me gusta de ella es lo que cuesta a veces que se quede fija la cantidad en la pantalla, fluctua con una diferencia de dos o tres garmos y hay que cambiarla de sitio para que deje de pasar.
Las ideales son las que pesan desde 1 a 5 kg, así nos sirve si queremos poner el vaso de la amasadora para pesar directamente encima de la báscula, nos ahorra tiempo y tener que lavar otros boles.
Para pesar cantidades muy pequeñas, utilizo un báscula pequeñita de precisión que suele utilizarse en joyería, pesa de 0,1 g hasta 350 g. y puede pesar en onzas. Ésta imprescindible no es, pero no viene mal tenerla, además su precio ronda los diez euros, que no es mucho. Y al ser tan pequeña es muy cómoda de llevar a cualquier parte y para un apaño puede servir para pesar cantidades mayores.